En el marco del Mes de la Agroecología, se realizaron las Terceras Jornadas por la Agroecología de Cerrito. Desde Fundación CAUCE, se presentó el informe El Plato Fumigado 2024.
Fundación CAUCE participó de las Terceras Jornadas por la Agroecología de Cerrito, un evento organizado desde el Instituto Técnico Superior de Cerrito (ITSC) y la Tecnicatura Superior de Agroecología que se enfoca en la difusión y puesta en común de conocimiento sobre agroecología, experiencias cooperativas de trabajo y de ganadería regenerativa. Se llevó a cabo el viernes 8 de noviembre en el Salón Superior de la Terminal de Ómnibus de Cerrito y contó con la presencia de estudiantes y docentes de escuelas así como de la Tecnicatura en Agroecología del ITSC.
Durante el encuentro, tuvimos la oportunidad de presentar el informe El Plato Fumigado 2024, elaborado en conjunto con Naturaleza de derechos. La presentación formó parte de la exposición “¿Si tiene agrotóxicos es alimento?”, coordinada por Glenda Inés Mangia, Lic. en Nutrición y Coordinadora del Área de Agroecología y Alimentación de nuestra Fundación.
Asimismo, la actividad permitió compartir diálogos y experiencias con investigadoras e investigadores científicos, y productores que compartieron experiencias y saberes tanto desde la academia como desde los territorios.
Compartir conocimientos
En el primer bloque, dedicado a la generación de conocimiento sobre agroecología, la Dra. Daiana Pérez presentó su tesis del Doctorado en Ciencias Sociales (UNER) “Vivir y producir”: las transiciones hacia la agroecología en Entre Ríos desde la experiencia de agricultores familiares (1990-2020). La investigación forma parte, además, de su trabajo como becaria del Instituto de Estudios Sociales (INES) de UNER-CONICET.
El trabajo aborda cómo agricultores familiares de los departamentos de Paraná y Concordia, en la provincia de Entre Ríos, han desarrollado formas alternativas de producción, intercambio y consumo en respuesta a las crisis generadas por el sistema agroextractivista dominante en América Latina. Utilizando un enfoque cualitativo y etnográfico, el estudio explora las prácticas productivas, económicas y políticas que impulsan las transiciones agroecológicas, las motivaciones de cambio y las estrategias de reproducción social de estas familias para mantener su labor agrícola.
La investigación analiza la relación de estas experiencias con políticas públicas, la institucionalización de la agroecología, la creación de conocimiento y las redes de producción y comercialización agroecológica. Además, reflexiona sobre los desafíos y avances en la agroecología en la región.
«La agroecología se presenta como una alternativa de revalorización del rol de la agricultura familiar como productora de alimentos al generar en torno a sí una reconexión de las personas con su oficio, que reimpulsa nuevas estrategias de persistencia y procesos territoriales. Al mismo tiempo, al promover transiciones agroecológicas, amplía, —como luego ahondaremos—, la cuestión de los sujetos agrarios. La agroecología se convirtió en la tracción y atracción de jóvenes y otros actores no agrarios a volcarse por la producción de alimentos, significando la vuelta al campo de generaciones que no veían en el trabajo agropecuario una opción para sus vidas. En ese sentido, también resignifica incluso el trabajo de ingenieros e ingenieras agrónomas. Por último, al desarrollar un replanteo del modo en que se produce y se intercambia la agroecología se convierte en un proceso de experimentación e innovación. De ahí que hayamos elegido un método etnográfico para acercarnos a conocer cómo se practica la agroecología en Entre Ríos», analiza Daiana Pérez en su trabajo.
Experiencias territoriales
Integrantes de la Cooperativa de Trabajo Tierra de Vida de Paraná presentaron su experiencia como productores agroecológicos. «Iniciamos la producción de nuestras propias semillas y, si bien no podemos iniciar la producción de todas las variedades que queremos, porque tenemos poco espacio, sí hicimos producción de puerro, de repollo, albahaca, caléndula», contaron.
Por su parte, el Ing. Agr. y productor Daniel Sánchez de Ovis 21 expuso sobre la ganadería regenerativa, así como el Ing. Agr. y productor Enrique Alfredo Arnold compartió su experiencia de ganadería regenerativa en el Establecimiento El Destino ubicado en la comuna de Febre, departamento Nogoyá.
«Del 25% de emisiones de gases de efecto invernadero que corresponden a la agricultura y los usos de la tierra, encontramos situaciones problemáticas como el estiércol, la producción de arroz por el uso de agua, energías para la agricultura, manejo de residuos, pérdida de suelos, a mí lo que me interesa mostrar es que el 40% de este total es a causa de la deforestación», resaltó Daniel Sánchez. «Entre Ríos tiene mucha deforestación todavía, hay una ley nacional y una ley provincial adherida a la nacional y, sin embargo, faltan controles. En las últimas dos décadas se deforestó una buena parte del norte de Entre Ríos para hacer agricultura», detalló.
De todos modos, hay una alternativa para la cría de animales: Sánchez explicó que la ganadería regenerativa –como parte de las prácticas de agroecología– convierte a los pastizales en «bombas de carbono» capaces de secuestrar toneladas de CO2 atmosférico. Esto posiciona a los productores y productoras como parte de la solución al cambio climático, más que como problema.
Fuente: Quantis, 2019
El Plato Fumigado 2024: ¿Qué comemos cuando creemos que estamos comiendo sano?
Las Guías Alimentarias para la Población Argentina (GAPA) fueron publicadas por el Ministerio de Salud de la Nación en el 2016 y, actualmente, se encuentran en estado de revisión y actualización bajo la dirección de la (FAO) y el Ministerio de Salud. Tienen como objetivo garantizar una alimentación saludable y prevenir enfermedades crónicas, adaptando conocimientos científicos a recomendaciones prácticas. Sin embargo, al comparar estas guías con los controles realizados por SENASA (2020-2022), se observan preocupantes niveles de agrotóxicos en los alimentos considerados saludables.
Este entrecruzamiento de datos se realizó a partir del trabajo conjunto entre Fundación CAUCE y Naturaleza de Derechos en el informe El Plato Fumigado 2024 y, sobre ello, expuso la Lic. en Nutrición Glenda Mangia, Coordinadora del Área de Agroecología y Alimentación de CAUCE.
Aunque las GAPA promueven el consumo de estos alimentos, la presencia de agrotóxicos y la falta de monitoreo del agua de consumo humano, con estudios mostrando hasta 20 tipos de agrotóxicos, revelan serias fallas en la protección de la salud pública.
Desde Fundación CAUCE, subrayamos la urgencia de incorporar recomendaciones nutricionales que prioricen alimentos provenientes de una agricultura agroecológica, alineados con las recomendaciones de la ONU sobre el derecho a la alimentación y el abandono de los modelos agroindustriales. Los alimentos agroecológicos no solo presentan hasta un 90% más de valor nutricional, sino que también están libres de agrotóxicos, lo cual mejora la inocuidad y la salud pública en comparación con los productos del modelo agroindustrial.