El próximo domingo 2 de febrero, Día Mundial de los Humedales, se lanza para toda América Latina y el Caribe la campaña regional “Remar Contracorriente por el Agua y la Vida”, una iniciativa que reúne a más de 80 organizaciones, entre ellas Fundación CAUCE, y colectivos de todo el continente para defender el agua, la vida y la soberanía de los ríos y cuencas de nuestro continente.
El lanzamiento está previsto en dos partes, una virtual, a partir de las 17 hs para las cuencas de América Latina que será transmitido a través de Facebook live y las redes de la Campaña y contará con la participación de referentes de organizaciones socioambientales de América Latina y el Caribe y de la Red Eclesial Justicia y Paz en la Patria Grande del CELAM (Consejo Episcopal latinoamericano y Caribeño) y otra local, de manera presencial, a las 18 hs en Sala Mayo (Paraná) que focalizará en la Cuenca del Plata y el sistema hídrico Paraná-Paraguay.
Asamblea Popular en Paraná
Referentes ambientales, sociales y políticos de la región se encontrarán a partir de las 18 hs, en Sala Mayo, para dialogar sobre soluciones conjuntas para la protección de nuestro río Paraná, su cultura, sus comunidades, sus humedales y ecosistemas asociados.
La convocatoria continental invita a realizar múltiples remadas y actividades en defensa de los ríos y surge como respuesta a la situación que atraviesa Argentina a través del proceso iniciado para la reprivatización de la gestión de la Hidrovía Paraná-Paraguay que prevé obras a lo largo de su trazado, incluyendo el dragado a 44 pies lo que implica destrucción de los humedales y un impacto negativo para las comunidades a la vera del río Paraná.
Antecedentes
La iniciativa “Remar contra corriente, por el agua y la vida” se inspira en la gesta protagonizada por dos pescadores artesanales del río Paraná, en Argentina, que en el año 1996 remaron en la canoa “Enamorada del río” durante 22 días desde Ituzaingó (Corrientes, Argentina) hasta Paraná (Entre Ríos, Argentina), para despertar la conciencia de los pueblos del litoral en defensa de su río e impedir la construcción de una mega represa hidroeléctrica que con capitales privados extranjeros, el aval del gobierno argentino y el apoyo del gobierno de EEUU, iba a construir en el Paraná Medio. Se trataba de un proyecto con enormes impactos ambientales, sociales y ecológicos, que se logró impedir por una gran resistencia popular que culminó con la sanción de la ley de Entre Ríos 9092/97, Ley de la Libertad de los Ríos.
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Reeditando esta gesta, el pescador y activista Luis Costa Romero, junto a referentes ambientales, liderará una nueva remada durantes el mes de marzo de 2025, recorriendo el Paraná desde Formosa hasta Santa Fe, con paradas en distintas localidades de la cuenca para visibilizar los problemas que enfrenta el río y promover la acción ciudadana.
Impactos que nos movilizan
El río Paraná, junto con el Paraguay, forma el corredor de humedales de agua dulce más extenso del planeta. Bajo el modelo de la Hidrovía Paraná-Paraguay, el Paraná ha sido transformado en una autopista de explotación al servicio de grandes corporaciones, desconectándolo de su naturaleza viva y su rol esencial como proveedor de agua, sustento y cultura.
- Impactos ambientales: La propuesta de aumentar el calado del río a 44 pies desestabilizaría ecosistemas críticos, afectando humedales esenciales que regulan inundaciones y sequías, perjudicando la calidad del agua y actividades como la pesca artesanal.
- Impactos sociales: Las comunidades costeras enfrentan riesgos como la contaminación del agua potable y el desplazamiento, agravando las desigualdades sociales en un contexto de crisis climática.
- Impactos económicos: Mientras el 80% de las exportaciones agroindustriales argentinas sale por el Paraná, la gestión privatizada perpetúa el saqueo de recursos y la evasión fiscal, dejando a las comunidades fuera de los beneficios.
Un llamado a la acción colectiva
“Remar Contracorriente” convoca a la ciudadanía, comunidades locales, pueblos originarios y movimientos sociales a unirse en defensa de nuestros ríos, reivindicando el rol del Estado y de las provincias en la gestión de los recursos hídricos.
Defender el Paraná y nuestras cuencas es proteger nuestra historia, identidad y futuro.
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